viernes, 8 de enero de 2010


Nunca pretendi ser ni sentirme superior. No esta en mi esa necesidad. Y aun asi, ellas pensaran que me vencieron. Pues no voy a ser yo quien vaya a sacarlas de ese error. Pero, utilizando su argumento como premisa, ahora podre mirarlas por encima del hombro sin remordimiento ni disimulo, pues su posicion asi me autoriza. Podre sentirme en el otro lado, junto a quienes tantas veces lo hicieron conmigo. Y asi sabran que no me importa, porque, a ciencia cierta, estoy segura de que saben que son inferiores a mi. Y todas esas desequilibradas, imbeciles, soberbias fuera de lugar, sentiran envidia. Seguiran sintiendo envidia y alimentando su rencor aunque se vean ganadoras.